“Es muy importante que la sociedad civil, los ciudadanos comunes estemos pendientes de cuáles comedores, iglesias, albergues que brindan atención a la población migrante y nos acerquemos con cualquier donación que esté en nuestras posibilidades pero realmente no perder de vista la importancia de la solidaridad”, recordó la doctora Valentina Glockner Fagetti. 

Señaló que en tiempos de pandemia en un país como México que no cuenta con los recursos suficientes para atender los flujos de personas que hemos estado viendo durante los últimos años y en condiciones de emergencia humanitaria y ahora de emergencia sanitaria, la situación se torna bastante difícil. 

El cierre de albergues, la reducción de espacios de acogida humanitaria, el cierre de comedores, también de espacios donde migrantes puedan pasar el día mientras esperan que concluyan trámites legales, tiene que ver con la suspensión de las actividades de voluntarios debido a la crisis sanitaria por COVID-19 son las principales afectaciones. 

Agregó que se ha visto interrumpida y una enorme disminución en los de flujos de donaciones, ya sea en especie o vía económica por parte de las personas que han tenido la posibilidad de ayudar y esta situación de la pandemia ha reducido las acciones en beneficio de los lugares que otorgan ayuda a los migrantes y ha provocado situaciones críticas en todo el país. 

“Hay que crear una concientización tanto al nivel de la sociedad como a nivel gubernamental de lo fundamental que es para niños, niñas y adolescentes que organizaciones de la sociedad civil y las procuradurías de los estados cuenten con todos los recursos y todas las capacidades para brindar cuidado, protección y atención a niñas, niños y adolescentes migrantes”, dijo.

Glockner Fagetti mencionó que otra situación difícil son las deportaciones masivas que realiza Estados Unidos, que se han registrado miles de ellas y fuera de las normas o acuerdos binacionales sin seguir los protocolos legales establecidos para ello y que exponen a los niños a redes de trata, y cuestiones graves que ponen en riesgo su salud e integridad. 

Destacó que las detenciones van en contra de los derechos humanos aunado a que son momentos de una emergencia sanitaria siguiera y aunque en algunos lugares cesaron, se tiene conocimiento de que hay estaciones migratorias en las que hay personas detenidas y a las cuales se les expone a un riesgo mayor de contagio. 

Indicó que lo que se vive actualmente es un fenómeno enteramente nuevo para el cual obviamente nadie estaba preparados y la migración infantil es ya en sí misma un fenómeno que pone a niñas, niños y adolescentes en grandes niveles de vulnerabilidad, representa riesgos a sus salud, a su integridad, a su desarrollo en un país que no tiene los recursos suficientes para atender los flujos de personas que se han reportado.