El impacto que tuvo en la relación que mantenían los indígenas ópatas con las autoridades hispanas, ante la nueva situación creada por la crisis de la monarquía hispánica a partir de 1808, la cual condujo a la guerra civil en la Nueva España, fueron los temas centrales de la participación del doctor José Marcos Medina Bustos en el III Congreso Internacional de Pueblos Indígenas de América Latina (CIPIAL), realizado en Brasilia, Brasil. 

El profesor-investigador de El Colegio de Sonora presentó la ponencia: "Entre la negociación y la rebelión: los liderazgos de indígenas ópatas en la frontera noroeste de México (1820-1840)" en la cual aborda la modificación profunda del “pacto colonial” o la alianza de los ópatas con los españoles, que inició un ciclo de inconformidad que en ocasiones estalló en rebeliones.

“En esta nueva situación surgieron liderazgos indígenas entre los ópatas, como Ignacio Dórame, Dolores Gutiérrez y Juan Güirizo, quienes, desde una posición propia, empezaron a competir por el cargo de capitán general, con otros liderazgos como el de Juan Evangelista Barrios y Blas Medrano”, mencionó. 

Durante las décadas de 1820 y 1830, dichos personajes desempeñaron un papel destacado en las relaciones establecidas con las autoridades locales y nacionales, en el marco de la conformación del estado nacional republicano federal y centralista. 

Además, analizó el repertorio de acciones que utilizaron en su lucha por la defensa de sus tierras y gobierno particular, las cuales incluyeron la negociación, el pacto con facciones de las elites enfrentadas entre sí y la rebelión abierta. 

En el evento realizado del 3 al 5 julio en la Universidad de Brasilia, Brasil; el doctor Medina Bustos coordinó, junto con la doctora Anna Guiteras Mombiola de la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona, un simposio con la temática: "Liderazgos indígenas en zonas de frontera latinoamericanas. Siglos XVI-XX". 

El objetivo del simposio fue recuperar a las personas indígenas que sobresalieron asumiendo diversos roles, y analizar el tipo de relaciones que mantuvieron tanto con los indígenas como con las autoridades coloniales o nacionales; los mecanismos a través de los cuales eran reconocidos como líderes; su papel como intermediarios y las comunicaciones escritas que utilizaron; el tipo de cargos que ocupaban. 

A lo largo de tres días se realizaron 62 simposios temáticos y 22 actividades integradoras, en las cuales participaron 1993 personas registradas, originarias de 14 países y se contó con la presencia de representantes de 101 pueblos indígenas. 

“Se reflexionó desde diferentes disciplinas acerca de la problemática que enfrentan y han enfrentado los pueblos indígenas de América Latina, en particular su lucha por defender su derecho a mantener su cultura y territorio”, sostuvo.