Fecha de publicación: 04/10/2019 Tweet Compartir
“Una reforma educativa que valga la pena, será aquella en la cual sea el magisterio de la escuela básica mexicana, el sector más respetado del País, porque el que enseña a leer y escribir, es el que nos permite poner organización y merece todo el respeto”, señaló el doctor Manuel Gil Antón.
El académico de El Colegio de México mencionó que a diferencia de lo que se piensa, los intelectuales más importantes de un país son los profesores y las profesoras de la escuela básica, pues los que enseñan en preescolar y en primaria a leer y escribir ayudan a sus alumnos a tener las herramientas con las cuales van a continuar toda la vida.
Durante la conferencia impartida en el auditorio de El Colegio de Sonora, agregó que la Reforma Educativa de 2012 estableció el Sistema Nacional para la Evaluación de la Educación como entidad reguladora del quehacer educativo y en 2018, se propone, en su lugar, un Centro Nacional para recuperar el valor de la docencia y realizar otros trabajos y estudios que contribuyan al avance en la tarea educativa.
En lugar de preservar en el artículo tercero el sentido y los valores de la educación, para que las Leyes Reglamentarias establecieran los detalles, las cuestiones laborales fuesen remitidas a su sitio (el artículo 123) y lo administrativo al espacio de trabajo de la SEP, explicó que se decidió que todo era materia constitucional para que tuviera fuerza y fuese incontestable.
“Se trata, entonces, de dos concepciones de fondo para transformar la educación. En una, la evaluación del magisterio, clave de su lógica, se empleó como instrumento laboral; en la actual, se propone como medio para orientar la capacitación de los docentes, pues la formación profesional es la raíz que le da sustento”, dijo.
Antón Gil advirtió que se trata no solo del arte de la política, sino de la precisión en la redacción de las normas básicas con el fin de que la arquitectura general quede bien delimitada, y que los procesos de detalle se puedan procesar, también en el legislativo, pero en otro nivel, más operativo y eficaz.
Destacó que el problema más importante que se tiene actualmente, es un problema teórico, es un problema en el terreno de las ideas y en esta ocasión es más difícil avanzar que resistir, pues debe existir un compromiso ético y una resolución política.
El doctor Juan Poom Medina, rector de El Colegio de Sonora fungió como moderador de la mesa y agradeció al invitado su participación y a la gran cantidad de asistentes al evento su participación en la sesión de preguntas y respuestas.