Zulema Trejo Contreras
La costumbre de beber té
El ritual inglés de tomar el té por las tardes lo hemos visto un sinfín de veces en películas y series, la imagen de esta costumbre está tan interiorizada en muchos de nosotrxs que no nos cuestionamos si realmente lleva a cabo como lo hemos visto, si de verdad es una costumbre que los ingleses exportaron.
La verdad es que en Inglaterra la costumbre de tomar té estableció como acontecimiento social por excelencia a fines del sigo XVII; y no fue idea de ningún inglés sino de Catalina de Portugal, reina de Inglaterra por su matrimonio con Carlos II. Las crónicas dicen que Catalina aborrecía en café, pero que le gustaba mucho el té especiado que se tomaba en Portugal por lo que adoptó la costumbre de importarlo de Portugal.
La reina solía tomar el té por las tardes probablemente con sus damas de compañía, que en aquel tiempo solían ser varias y estaban con la reina en todo momento.
Si bien el té era una bebida conocida en Inglaterra, no era de uso común entre las clases altas pero una vez que la reina comenzó a consumirla toda la nobleza adoptó su consumo y dado que la reina bebía té por la tarde no pasó mucho tiempo en que esta costumbre se extendiera en las clases altas inglesas.
La reina Catalina no tomaba el té sola, hubiera sido imposible que lo hiciera dada las costumbres de la época, así que siguiendo su ejemplo las clases altas adoptaron la costumbre de invitar personas a tomar el te por las tarde.
Está de más decir que la costumbre de tomar el té con los amigos se extendió tanto, que ya en la primera década del siglo XVIII se fundaron los primeros establecimientos para la venta de te, o casas de te como se les llamaba en la época.
En el siglo XIX la costumbre de tomar el te ya estaba arraigada en la sociedad inglesa de tal forma, que comenzó a tomarse como una característica inherente al ser inglés. Incluso se dice que el emperador alemán Guillermo II, quien fue derrocado durante la primera guerra mundial, dijo cuando llegó a Holanda “es buen momento para tomar una taza de te inglés”.
La costumbre de tomar el te no ha tenido prácticamente ninguna influencia en un México donde el café ocupa el lugar de honor cuando se trata de la convivencia entre amigxs.
El té en México tiene más bien un uso medicinal. Me atrevería a señalar que la mayoría de nosotrxs hemos tomado un te para la tos, la gripa, el dolor de cabeza o los famosos e indefinibles nervios.
*Profesora-investigadora en El Colegio de Sonora.