Óscar Bernardo Rivera García
Migrantes en Conflicto con la Ley
Un Adolescente Migrante en Conflicto con la Ley es todo menor de dieciocho años cumplidos y mayor de catorce años que experimentó una movilización de su lugar de origen y. esté cumpliendo la medida cautelar de privación de la libertad por habérsele comprobado su participación en un delito.
En sí mismo; un viaje migratorio sin importar la edad, es una experiencia que pone en peligro la integridad de quien lleva a cabo dicho viaje; si un adolescente que viaja solo lleva a cabo el viaje migratorio, cruza hacia Estados Unidos (sin la documentación necesaria) y es repatriado; se genera uno de los momentos de mayor incertidumbre en todo el proceso migratorio.
A saber, el proceso Migratorio contiene: 1) una posible razón o motivo, 2) predeterminar a la movilización espacial como posible respuesta a esa razón o motivo, 3) tener al alcance elementos tangibles para obtener la respuesta (información necesaria para una posible movilización) y 4) considerar múltiples factores personales como reunificación familiar u ofertas laborales, las más comunes. De ser el caso, se agrega un 5 elemento: repatriación, volver a un punto donde se debe decidir si se permanece en la zona fronteriza (solo, sin dinero y sin familia, conocidos o amigos que le pudieran ayudar) o si se regresa a su lugar de origen (sin haber obtenido ninguna garantía para mejorar su calidad de vida).
Es en este punto donde los adolescentes están inmersos en el momento de mayor vulnerabilidad; son considerados como “migrantes de circuitos”, entendiéndose como aquellos que por diferentes cuestiones o circunstancias se encuentran radicando de manera permanente o estacionaria en algún espacio fronterizo y deben buscar las estrategias para sobrevivir.Se trata de actores que por la misma condición de precariedad buscan opciones laborales que en ocasiones están fuera de los lineamientos legales: trabajan cargando y traficando mercancía (normalmente trasiego de drogas), son contratados como guías por los polleros y algunos otros empleos ilícitos; los “polleritos” o “burreritos”. Se convierten en la mano de obra ideal para el crimen organizado.
¿Qué es lo que hace tan atractivo a los adolescentes migrantes para que sean reclutados por las células del crimen organizado? Para darle respuesta, primero debemos tener en cuenta que un adolescente migrante “acumula” diferentes situaciones de vulnerabilidad en tres sentidos: 1. En lo social; el escenario de precariedad en el que se desenvuelve construye su identidad y este se asume como la única alternativa (motivo por el que migra en busca de esas ausencias). 2. En lo biológico; la adolescencia implica cambios físicos y cognitivos que determinan al adolescente, además, en la adolescencia se comienza a planear una vida que exige elementos económicos y culturales para la planeación, etapa sumamente complicada si no se tienen los elementos básicos como familia, educación, comida, trabajo, etcétera. 3. En lo legal; las medidas cautelares que reciben los menores de 18 años son menos hostiles que las que reciben los mayores de edad.
Lo anterior a partir del precedente que todas las instituciones en México buscan hacer valer el Interés Superior de la Niñez (Reglas de Beijín, Derechos Internacionales de niños, niñas y adolescentes de la Unicef). Se busca que los menores de 18 años contengan todos los elementos para un desarrollo integral. Esta interpretación “legal”, es tergiversada por las personas que buscan reclutar a un adolescente migrante varado en un espacio fronterizo y que hará lo necesario para sobrevivir.
Empiezan a convencer a los menores de 18 años para participar en actividades ilícita puesto no les genera una inversión significativa y pueden ser remplazados con otro niños, niñas o adolescentes migrantes que viven en espacios fronterizos.
Lo anterior es parte del proyecto denominado Diagnóstico fronterizo de niños, niñas y adolescentes migrantes en conflicto con la ley.
Con este trabajo se busca visibilizar las situaciones de vulnerabilidad por las que atraviesa uno de los actores más desprotegidos en todo el proceso migratorio: niños, niñas y adolescentes.
*Egresado de la promoción 2012-2015 del posgrado. Actualmente en Instituto de Investigaciones Sociales, Universidad Autónoma de Baja California, Mexicali, B. C.